La bebé, que tenía dos horas de nacida, tenía un color azul, por lo que su padre pensó que no sobreviviría y decidió deshacerse de ella
Camaras de seguridad muestran el momento en que un hombre arroja a su hija recién nacida a un contenedor de basura en China. El incidente fue captado el pasado 15 de enero en la ciudad de Xuanwei, ubicada en la provincia de Yunnan.
Informes oficiales señalan que el hombre puso a la menor en una bolsa de papel antes de dejarla entre la basura. Al momento de los hechos la niña llevaba tan solo dos horas de nacida.
De acuerdo a la policía, los padres decidieron deshacerse de la bebé al pensar que no iba a sobrevivir al ponerse azul. Una mujer encontró a la infante por casualidad, tras lo cual la llevó al Hospital Regional de Xuanwei, de donde posteriormente fue trasladada a un centro comunitario.
Médicos dijeron que la menor, quien aún tenía el cordón umbilical, se encuentra en buen estado de salud. Añadieron que el color morado se debió a las bajas temperaturas en la región.
El padre, identificado como Li, permanece detenido por violar la ley, mientras que la madre fue liberada tras pagar una fianza.
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