Ciudad de México
El pollo frito al estilo KFC es un plato icónico de la cocina estadounidense, reconocido por su sabor único y crujiente. Esta receta, creada por el Coronel Sanders en la década de 1950, se ha convertido en un fenómeno global con miles de restaurantes en todo el mundo.
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El proceso de preparación implica marinar el pollo en una mezcla secreta de hierbas y especias durante varias horas, antes de ser empanado y frito a la perfección. La combinación de ingredientes cuidadosamente seleccionados, junto con la técnica de fritura especializada, resulta en un pollo tierno por dentro y crujiente por fuera.
El éxito del pollo frito al estilo KFC radica en su receta única y en el meticuloso proceso de preparación que garantiza un sabor consistente en cada bocado. Además, su popularidad se ha visto impulsada por la experiencia de marca y la consistencia de calidad que ofrece la cadena KFC en sus numerosos establecimientos en todo el mundo.
Aquí tienes una receta para preparar pollo frito al estilo KFC en casa:
Ingredientes:
- 8 piezas de pollo (muslos, pechugas, alas, etc.)
- 2 tazas de suero de leche
- 2 tazas de harina de trigo
- 2 cucharadas de sal
- 2 cucharadas de paprika
- 1 cucharada de pimienta negra molida
- 1 cucharada de ajo en polvo
- 1 cucharada de cebolla en polvo
- 1 cucharada de tomillo seco
- 1 cucharada de orégano seco
- 1 cucharadita de chile en polvo (opcional)
- Aceite vegetal para freír
Instrucciones:
En un tazón grande, mezcla el suero de leche con 1 cucharada de sal. Remoja las piezas de pollo en esta mezcla y déjalas marinar en el refrigerador durante al menos 2 horas, o preferiblemente durante la noche.
En otro tazón grande, mezcla la harina con las especias restantes: 1 cucharada de sal, paprika, pimienta negra, ajo en polvo, cebolla en polvo, tomillo, orégano y chile en polvo (si se desea un toque picante).
Calienta suficiente aceite vegetal en una sartén grande o en una freidora a 170-180°C (340-360°F).
Saca el pollo del suero de leche y escúrrelo bien. Pasa cada pieza de pollo por la mezcla de harina, asegurándote de que estén completamente cubiertas.
Sacude el exceso de harina y coloca las piezas de pollo en el aceite caliente, cuidando no llenar demasiado la sartén para que el pollo pueda freírse uniformemente.
Fríe el pollo durante unos 15-20 minutos, volteándolo ocasionalmente, hasta que esté dorado y crujiente por fuera y cocido por dentro. Asegúrate de que el pollo alcance una temperatura interna de al menos 75°C (165°F).
Una vez frito, coloca el pollo sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.
Sirve caliente y disfruta de tu pollo frito al estilo KFC casero con tus acompañamientos favoritos.
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